En la búsqueda de formas naturales para cuidar nuestra salud, especialmente la cerebral, ciertos ingredientes ancestrales están volviendo a captar la atención de la ciencia. Uno de ellos es el fascinante hongo Hericium erinaceus, más conocido como Melena de León. Este hongo comestible, utilizado durante siglos en la medicina tradicional de países asiáticos como China y Japón, está revelando un potencial asombroso para optimizar nuestro desempeño cognitivo y proteger nuestra salud neurológica.
Con su apariencia única que recuerda a una cascada de barbas blancas, la Melena de León (también llamado Yamabushi take en japonés o Houtou en chino) no es solo un ingrediente culinario interesante; estudios sugieren que puede ser un poderoso aliado para nuestra memoria. Pero, ¿qué dice la ciencia al respecto?
Los Compuestos Clave: Hericenonas y Erinacinas
El secreto detrás de los potenciales beneficios de la Melena de León para el cerebro reside en sus compuestos bioactivos. Entre la amplia variedad de metabolitos secundarios que se han identificado en este hongo, dos familias destacan particularmente por sus efectos a nivel del sistema nervioso: las hericenonas y las erinacinas.
Las hericenonas se encuentran principalmente en el cuerpo fructífero del hongo (la parte visible y carnosa, como la "melena"), mientras que las erinacinas se hallan casi exclusivamente en el micelio (la red filamentosa que crece bajo tierra o dentro del sustrato). Se han identificado al menos 15 tipos de erinacinas.
Estimulando el Factor de Crecimiento Nervioso (NGF)
Tanto las hericenonas como las erinacinas son compuestos de bajo peso molecular que han demostrado tener una capacidad notable: estimulan la síntesis del Factor de Crecimiento Nervioso (NGF).
El NGF es una proteína esencial para la supervivencia, desarrollo y mantenimiento de las neuronas. Actúa como una especie de "alimento" o "fertilizante" para las células nerviosas, regulando su diferenciación y proliferación. La deficiencia funcional de NGF se ha relacionado con enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer.
Las erinacinas parecen ser particularmente potentes para estimular la secreción de NGF, incluso más que las hericenonas en algunos bioensayos. La Erinacina A, considerada un representante clave del grupo, ha demostrado aumentar los niveles de NGF en áreas cerebrales importantes para la memoria, como el hipocampo, en modelos animales. Se cree que este aumento de NGF contribuye significativamente a la supervivencia de las neuronas y mejora los resultados conductuales en varios modelos animales.

Promoviendo la Neurogénesis y la Salud Neuronal
Históricamente, se creía que las células nerviosas no se renovaban, pero esta idea ha sido desafiada. La ciencia moderna ha demostrado que existe un proceso llamado neurogénesis, la creación de nuevas neuronas, que ocurre en ciertas regiones del cerebro, notablemente en el hipocampo.
La capacidad del cerebro para crecer y formar nuevas conexiones tiende a disminuir con la edad, lo que contribuye al deterioro cognitivo. Al estimular la síntesis de NGF, los compuestos de la Melena de León parecen ser capaces de fomentar la formación de nuevas células nerviosas (neurogénesis), especialmente en el hipocampo.
Además de la creación de nuevas neuronas, la Melena de León también podría ayudar a regenerar la capa de mielina que protege las conexiones nerviosas y mejorar la plasticidad sináptica, que es la capacidad de las sinapsis (las conexiones entre neuronas) para fortalecerse o debilitarse con el uso, un proceso fundamental para el aprendizaje y la memoria.

Protección Adicional: Antioxidante y Antiinflamatorio
Más allá de la estimulación del crecimiento neuronal, los compuestos de la Melena de León también actúan como escudos protectores para el cerebro. Exhiben propiedades antioxidantes, neutralizando los radicales libres que pueden dañar las neuronas con el tiempo, y efectos antiinflamatorios, reduciendo la producción de sustancias proinflamatorias en el cerebro.
La inflamación crónica y el estrés oxidativo son factores que contribuyen al desarrollo de enfermedades neurodegenerativas. Al mitigar estos procesos, la Melena de León ayuda a mantener las neuronas en un estado más saludable.
Además, algunos estudios preclínicos sugieren que erinacinas específicas (Erinacina A y S) pueden ayudar a reducir la acumulación de placas de beta-amiloide e incluso atenuar la hiperfosforilación de la proteína Tau. Estas acumulaciones de proteínas tóxicas (placas seniles y ovillos neurofibrilares) son hallazgos característicos de la enfermedad de Alzheimer.
Resultados en Estudios: Mejoras Cognitivas
Los mecanismos descritos (estimulación de NGF, neurogénesis, neuroprotección antioxidante y antiinflamatoria, reducción de beta-amiloide) se traducen en potenciales mejoras en la función cognitiva, especialmente en la memoria.
Estudios en animales han demostrado mejoras notables en la memoria después de la administración de extractos de Melena de León. Por ejemplo, se observaron mejoras en la memoria espacial en ratas tratadas con el hongo, lo cual se correlacionó con un efecto neuroprotector en las neuronas del hipocampo.
Aunque la investigación en humanos es aún limitada, algunos ensayos clínicos iniciales han arrojado resultados prometedores:
•
Un estudio con adultos japoneses de 50 a 80 años con deterioro cognitivo leve mostró mejoras significativas en la cognición y el aprendizaje después de tomar cápsulas de Melena de León con Erinacina A diariamente durante 49 semanas, en comparación con un grupo de control. La mejora en la función cognitiva se evaluó utilizando escalas como el Mini-Examen del Estado Mental (MMSE) y la Escala de Demencia de Hasegawa revisada.
•
Otro estudio con participantes de 31 años en promedio, que consumieron galletas con polvo del cuerpo fructífero del hongo durante 12 semanas, mostró un efecto beneficioso en la memoria a corto plazo y mejoró las funciones cognitivas.
Además de los efectos cognitivos, se ha observado una disminución en los niveles de ansiedad y depresión en un estudio con mujeres menopáusicas que consumieron Melena de León durante 4 semanas. Estos efectos adaptogénicos también pueden influir positivamente en la claridad mental y el enfoque.

Fuentes
•
Bonilla-Luna, D., Elías-Ramírez, M., & Juárez-Zamora, A. (2023). Melena de León (Hericium erinaceus): El guardián neuroprotector. RD-ICUAP, 9(27), 55–67. https://doi.org/10.32399/icuap.rdic.2448-5829.2023.27.1180
•
García Delgado, L. (2022). Efectos de la administración de extracto del hongo Hericium erinaceus sobre la memoria espacial y morfología de neuronas de las regiones CA1 y CA3 del hipocampo en ratas ovariectomizadas [Tesis de Maestría, Universidad de Guadalajara]. RIUdeG. https://hdl.handle.net/20.500.12104/92258
•
Guio, L. (2025, abril 27). Descubren que el hongo Hericium erinaceus podría prevenir el alzhéimer, según estudio. Medicina y Salud Pública ® - MSP.
•
Hongo Melena de León: El secreto natural para un cerebro más ágil. (n.d.). Dumo Labs. (Nota: El autor y la fecha exacta de publicación no se especifican en el extracto proporcionado).
•
Interés terapéutico de la melena de león (Hericium erinaceus). (n.d.). SEFIT (Sociedad Española de Fitoterapia). (Nota: El autor y la fecha exacta de publicación no se especifican en el extracto proporcionado).
•
Melena de león y neuroprotección: ¿qué dice la ciencia sobre la hericénona y la erinacina? (2025, febrero 18). French Mush. (Nota: El autor no se especifica en el extracto proporcionado. La fecha proporcionada parece ser en el futuro).
•
Rivera Duque, M. P. (2023). Estudio del efecto del positivo del consumo del hongo Hericium erinaceus en la prevención de enfermedades neurodegenerativas como la enfermedad de Alzheimer esporádico [Trabajo de grado de Especialización, Unilasallista Corporación Universitaria Facultad de Ingenierías].
•
Sinde Stompel, E. (2016, septiembre 14). Melena de león, clave en la memoria y la neurogénesis. Hifas da Terra.
